
Lucha en el Matrimonio
Me llamo Juan, llevo 20 años casado, me gustaría decir que llevo 20 años felizmente casado, pero esta felicidad no consiste en risas y algarabías, sino que esta felicidad se traduce en LUCHA.
LUCHA: cuando los hijos son pequeños y debemos conciliar trabajo con crianza de los niños.
LUCHA: cuando son mayores y tienes que gestionar problemas de amigos, salidas, fiestas….
LUCHA: en la fidelidad, el enamorarse y enamorarse todos los días….
Reconozco que la infancia espiritual me ha ayudado en todas estas luchas….enfadarse lo justo, desenfadarse rápido, confiar y abandonarse en la providencia.
Juan (Madrid)
Tener Razón
La infancia espiritual y confiar en Dios me ha llevado a desprenderme de algo que consideraba valiosísimo: LA RAZÓN.
Ante un conflicto, o, simplemente en una conversación siempre intentaba tener razón, mis criterios y mis opiniones me parecían que debían de sobresalir sobre el resto.
Tras recurrentes y fuertes conversaciones que generaban en mi alma un pesar he decidido con ayuda de la Virgen: ¡¡¡me da igual tener la razón!!!
He realizado un acto heroico de desprendimiento de la razón.
Rafaela (Madrid)
Muy bien